Por Eliza Flores
En Morelia, existe un altar especial para quienes creen en la Santa Muerte, conocido como el altar de «La Madrina», en la colonia Las Flores.
La señora Josefina Espinoza López monta en la calle Margarita y sobre el Río Chiquito, altares de Día de Muertos en honor a su hijo Omar Jesús Ortiz Espinoza, quien fue el primero en colocar un altar con la imagen de la Santa Muerte afuera de su casa.
Con orgullo, Josefina cuenta cómo su hijo comenzó lo que hoy consideran una tradición. Durante el Día de Muertos, la gente llegaba a su casa a visitar a la «Santa», llevándole velas y flores, hasta que un día Omar decidió colocar el altar en la calle.

Ahora, Josefina, junto a sus cuatro hijos, vecinos y amigos, monta cuatro altares para recibir a los difuntos la noche del 1 y la madrugada del 2 de noviembre, uno de ellos en memoria de Omar. La celebración incluye música, con banda y norteño, y es una noche de fiesta.
«La tradición la empezó mi hijo Omar Jesús Ortiz Espinoza (…) Hoy está aquí conmigo. A él le gustaba todo esto, y yo lo continué. Dije: ‘Él ya no está, pero yo sí estoy aquí'», comenta Josefina mientras la gente se forma para recibir la cena que ella ofrece en agradecimiento.

En el centro de la celebración se coloca una imagen especial de la Santa Muerte, vestida de negro y morado con una corona. Frente a ella hay un pastel y una ofrenda con velas, incienso y alcohol. Cerca de la medianoche, le cantan las mañanitas.
Los vivos continúan la tradición de los muertos
Este año, la señora Cinthia Benítez Piña llegó de rodillas al altar, cumpliendo la última manda por un favor que la Santa Muerte concedió a su esposo. Durante su embarazo, Cinthia tuvo varias amenazas de aborto, por lo que su esposo prometió traer a su hija al altar si lograba nacer.

«Mi esposo prometió traerla varios años, y ahora yo cumplo en su nombre», explica Cinthia, quien lleva casi diez años encomendándose a «La Niña Blanca». Según ella, los mitos de que la Santa Muerte «castiga» son infundados. «Hay que trabajar y esforzarse; la Santa es un apoyo, pero con fe y luchando por los sueños es como se logran las cosas», afirma.
El altar de muertos en la Colonia de las Flores
Durante toda la noche, la gente llega a los altares de «La Madrina», algunos con velas o vino; otros ofrecen ayuda para servir, colaborar con la música, o apoyar con flores y otros materiales. El altar principal se monta en la esquina de las calles Margarita y Río Grande, en la colonia de Las Flores, Morelia, cualquier persona puede acercarse y poner una fotografía de alguien que ya falleció, la señora Josefina recomienda que esté en un cuadro, para poderla guardar y colocarla en el altar de años siguientes.

«La Madrina», en agradecimiento a todos los que ayudan o acompañan en el rezo de Día de Muertos, ofrece pozole y atole caliente, la fiesta se llena de música y toritos de petate.