Gaona Inc
Fuera de lugar
Gallo Negro
Cacique: Persona que en una colectividad o grupo ejerce un poder abusivo.
Es casi imposible de 30 años para acá tratar de encontrar una elección donde el apellido Gaona o alguien muy cercano al mismo no aparezca en una boleta con aspiraciones a un encargo político.
Y es que desde que el muy recordado «Don Balta Gaona» iniciará su camino en la política, no ha pasado una elección donde esa familia no haya tenido un representante o un “apadrinado” corriendo en alguna planilla o encabezándola.
Siempre envueltos en la polémica y muchas veces señalados como los “malos” del cuento, el apellido Gaona ha trascendendido como una muy lucrativa marca política/empresarial con influencia y peso específico en lo que al municipio de Tarímbaro se refiere.
Que si el lobo, que si el mercado, que si delincuencia organizada, que si son buenos o malos y muchas otros supuestos, están ligados tácitamente a el apellido.
El emporio construido a través de los años así como el posicionamiento de la marca, les permite hoy darse el lujo de hacer temblar a una frágil coalición PT/Morena en el municipio, jalando sus hilos, creando separación, aventando la caballada por delante y sin despeinarse.
Aunque la historia siempre tiene muchas versiones, las que van ligadas a este apellido se contraponen; o son muy buenos o son muy malos. Encarnan la esperanza del municipio y el buen trabajo o son los peores caciques capaces de las peores prácticas, mismas que han impedido el avance de Tarímbaro, cuestión de óptica.
No sé usted amable lector, pero a mí sí me preguntan que es lo más representativo que tiene Tarímbaro se me vienen 3 cosas a la cabeza: el carnaval, el pulque y el apellido Gaona (con todo lo que representa).
Con muchísimos detractores pero también cientos si no miles de simpatizantes, pareciera que el apellido viene ya en la boleta por default, cambia quizás el partido pero el apellido sigue ahí.
¿En que momento terminará está que pareciera una simbiosis entre municipio y la familia Gaona?, solo quienes viven en este municipio tiene la respuesta, pero sobretodo el poder de seguir dándoles raja en el juego o de una buena vez extirpar su influencia en el devenir de la ciudad.
Nota final: A mí si me gusta la escultura del lobo, dejen que la instalen de nuevo.
